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FUNDACIÓN

a fundación del pueblo de Sabana Grande se remonta al 1813 luego que, vecinos pudientes de la parroquia San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, aprovecharan los beneficios de la Constitución política del 1812.

Sabana Grande Arriba y Sabana Grande Abajo eran barrios de la antigua Villa de San Germán. Vecinos de este pueblo, porteadores de su historia oral, señalaban que las quejas sobre los obstáculos creados por las crecientes de los ríos y quebradas, aislándolos de las otras poblaciones e imposibilitándoles asistir a las grandes ceremonias religiosas de Cuaresma en la Villa de San Germán, aceleraron el proceso de fundación del partido de Sabana Grande.

Según el acta del 5 de diciembre de 1813, de la Villa de San Germán, acudieron a esa población decenas de vecinos interesados en la fundación del nuevo pueblo para la elección de los 31 compromisarios. Resultaron electos: el vicario don Francisco Antonio Soltero, el cura teniente don Juan Francisco de Acosta, don José Antonio de Sepúlveda, don Juan Miguel Rodríguez de la Seda, don Domingo Postigo, don José Jusino, don Manuel Esteban de Ribera, don José Barrientos, don Germán Pagán, don Ramón Ramírez, don Andrés del Toro, don José Monserrate Ramírez, don Andrés de Quiñones y don Antonio Ramírez de Arellano.

También, don Vicente Dávila, don Manuel Sepúlveda, don Juan Vélez, don Juan Francisco Nazario, don Antonio Ramírez, don Anacleto del Toro, don Juan Milán, don Ramón de Quiñones, don José Ramírez, don Mariano de Quiñones, don Germán de Lugo, don Manuel del Toro, don Juan Manuel de Ribera, don Vicente Ramírez, don Pedro de Sepúlveda, don Silverio de Lugo y don José Pabón.

De acuerdo al Acta, "después de haber los compromisarios conferenciado libremente sobre los sujetos que convenía nombrar electores parroquiales, pasaron a la votación secreta", siendo electos el vicario don Francisco Antonio Soltero, el capitán de Granaderos de Milicias nacionales don Faustino del Toro, y don José Antonio de Sepúlveda.

El 21 de diciembre de ese año, fue juramentado don Pedro de Acosta (ver foto a la derecha) como Teniente a Guerra del pueblo de San Isidro en Sabana Grande Arriba, "con lo que quedando puesto en posesión de su respectivo empleo se finalizó esta diligencia, debiendo en el primer día festivo hacerse notorio a aquel vecindario para que le obedezcan como tal, guarden y hagan guardar las prerrogativas, excepciones que como tal le corresponden...".

El Padre Martín Antonio Borreli, sabaneño, firma en el Libro III de Matrimonios núm. 24 por primera vez como "cura ecónomo de la Parroquia de Sabana Grande" el 1 de julio de 1813. Se cree que la Parroquia de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza fue erigida como tal en 1813 por el obispo Juan Alejo Arizmendi.

La antigua iglesia de cúpula ciega tenía un retablo de albañilería con imágenes de San Isidro y Santa María de la cabeza de principios del siglo XIX, del artesano puertorriqueño Tiburcio Espada. Resalta en el templo la ausencia de elementos decorativos y pocas fuentes de luz. Un plafón de madera que se curva levemente en los extremos simulan una bóveda. Al igual que en la iglesia de Manatí, la de Sabana Grande tiene una torre al costado sur del ábside.

En el 1852, el párroco sabaneño José Ramón de Soto (1845-66) bendijo la nueva iglesia reconstruida gracias a los 10 mil pesos que el padre Acosta dejó en su testamento para ese fin. Doce años más tarde bajo la regencia del padre Ramón, se colocó el reloj -hecho en Francia- en la fachada neoclásica del templo, quizás el segundo más antiguo que existe en una iglesia de la Isla.

En 1875, según Actas del Cabildo, alertaban "el estado de deterioro en que se encontraba la iglesia" y el "peligro de desplomarse la azotea en el momento más inesperado". No obstante, nada se hizo y en 1880 hubo que cerrar el templo por su estado ruinoso, lo que movió a la feligresía pudiente a ayudar a repararlo. En 1934, el obispo de Ponce Monseñor Luis J. Willinger promovió de nuevo la reconstrucción de la iglesia, y el 13 de marzo de 1939 bendijo la nueva Casa Parroquial anexa a la iglesia.

A continuación los nombres de los párrocos de la iglesia sabaneña en los siglos XIX y XX, horarios de los servicios eucarísticos de la parroquia, seguida de una lista de los años que abarcan sus registros parroquiales. En la sacristía de la Catedral de San Juan se encontró un libro de matrimonios de Sabana Grande. En el terrible incendio del 1 de abril de 1892, que destruyó tantas viviendas en el pueblo, se quemaron muchos de los documentos históricos del municipio. Hay un auto de visita del obispo Arizmendi entre los libros de Bautismos de 1813-1841. En 1897, se subastaron las obras de reparación de la iglesia.